La logística verde ha surgido como una práctica empresarial sostenible que no solo beneficia al medio ambiente, sino que también aporta ventajas significativas a las operaciones comerciales como en el transporte y almacenaje.

Realizar prácticas de logística verde se ha vuelto esencial en todos los procesos logísticos para las empresas que buscan destacar en el mercado actual.

La implementación exitosa de la logística verde implica la adopción de diversas características que no solo mejoran la sostenibilidad ambiental, sino que también optimizan las operaciones comerciales. Estos son algunos ejemplos:

• Vehículos y métodos de transporte eficientes desde el punto de vista energético.
• Minimizar el exceso de stock reduce la necesidad de almacenamiento y transporte, disminuyendo así las emisiones y los residuos asociados.
• Embalaje ecológico y la reducción del uso de envases innecesarios.
• La utilización de tecnologías como el IoT (Internet de las cosas) y el análisis de datos son fundamentales para una logística verde eficaz.
• Adopción de fuentes de energía renovable, como la solar o la eólica, en las instalaciones de almacenamiento y distribución.

1. Reducción de emisiones de carbono

Se centra en la eficiencia energética y en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Al optimizar las rutas de transporte y utilizar vehículos ecoeficientes, las empresas pueden disminuir su huella de carbono.

2. Ahorro de costos y mejora de la eficiencia energética

La implementación de prácticas logísticas verdes conlleva una mayor eficiencia energética. Además, la optimización de rutas y el uso de tecnologías avanzadas no solo disminuyen las emisiones, sino que también reducen los costos operativos.

3. Mejora de la imagen de la empresa

Las empresas comprometidas con la logística verde construyen una sólida reputación corporativa. En la actualidad, los consumidores valoran cada vez más las prácticas sostenibles y eligen aquellas empresas que demuestren un compromiso real con la responsabilidad ambiental.

4. Cumplimiento de regulaciones ambientales

La adopción de prácticas logísticas verdes permite a las empresas cumplir con las actuales normativas ambientales, que cada vez son más estrictas. De esta manera se evitan sanciones asociadas con emisiones excesivas o prácticas no sostenibles.

La transición hacia una logística verde implica la realización de prácticas sostenibles en cada etapa de la cadena de suministro. Estos son algunos pasos prácticos para implementar la logística verde en tu empresa:

1. Evaluación de la cadena de suministro actual

Antes de realizar cambios, es importante conocer la huella ambiental actual de la empresa. Para ello, se deberá realizar una evaluación exhaustiva del consumo de combustible, de las emisiones de gases de efecto invernadero y otros aspectos clave de la cadena de suministro.

2. Establecimiento de objetivos y metas

Se deberán definir metas específicas y medibles para la implementación de la logística verde de tu empresa, como la eficiencia energética, la reducción de emisiones y otros aspectos ambientales.

Estos KPIs proporcionarán una guía clara y permitirán realizar un seguimiento continuo del progreso.

3. Implementación de tecnologías sostenibles

Se utilizarán tecnologías de información para optimizar las rutas de entrega. Los sistemas de gestión logística avanzados pueden ayudar a planificar rutas eficientes, reduciendo el tiempo de viaje y el consumo de combustible.

Los software de seguimiento en tiempo real también permiten un control continuo y una toma de decisiones basada en datos.

4. Capacitación del equipo

Es importante incluir al equipo en el proceso de implementación de la logística verde, proporcionando capacitación sobre prácticas sostenibles y destacando la importancia de su contribución individual en la reducción del impacto ambiental.

La gigante sueca del mueble, IKEA, ha sido una de las primeras empresas en la implementación exitosa de prácticas de logística verde.

Su compromiso con la sostenibilidad se refleja en la adopción de estrategias innovadoras que abarcan desde el uso de vehículos eléctricos hasta la implementación de sistemas de transporte intermodal.