La mercancía de aduana es el valor de una mercancía en una transacción, o lo que es lo mismo es el precio que se paga por las mercancías cuando éstas se venden para su exportación en el territorio de la Unión Europea.

Para administrar el arancel aduanero, tanto de las Comunidades Europeas como de otras normas arancelarias, es importante saber este valor de la mercancía en aduana.

Existen tres tipos de aduanas:

1. Aduana Terrestre

Las aduanas terrestres se sitúan en las fronteras entre países y, tal y como su nombre indica, se dedican a regular el tráfico de personas y mercancías por tierra.

Son aduanas terrestres: el transporte de personas y el transporte de mercancías por vía férrea.

2. Aduana Marítima

Las aduanas marítimas están ubicadas en las zonas portuarias y se encargan de controlar el tráfico de mercancías por mar. Además, también realizan el control de personas provenientes de cruceros turísticos.

3. Aduana Aérea

A diferencia de las aduanas marítimas, las aduanas áreas se encargan de regular el tráfico de personas, la circulación de mercancías y el equipaje de pasajeros en el transporte aéreo.

Estas aduanas se ubican en los aeropuertos internacionales, situados en grandes ciudades y en importantes zonas turísticas.

Siempre que exista una transacción económica de por medio, en España cualquier mercancía importada con un valor superior a los 22 euros debe realizar el pago del impuesto.

Hay algunos productos que están libres de derechos y otros que pueden encontrarse sujetos a derechos adicionales, dependiendo del país de origen.

En el caso del traspaso de mercancías entre países comunitarios no hay aranceles, sólo se aplica el IVA de cada país en el que se produce la importación.

Para calcular el impuesto de aduana o ‘deuda aduanera’, tenemos que tener en cuenta tres elementos:

1. El valor en aduana:

Es el elemento primordial para calcular el impuesto. La OMC (Organización Mundial del Comercio) habla de seis métodos para calcular este valor y todos son empleados por todas las autoridades aduaneras.

De estos seis métodos se destaca el ‘valor de transacción’, que consiste en el precio que el comprador paga al vendedor a cambio de unos productos.

2. El arancel que se aplica:

Es el segundo elemento a tener en cuenta para calcular los aranceles de importación. En él se utiliza el conocido ‘sistema armonizado’, una clasificación de los productos desarrollada por la Organización Mundial Aduanera en función a un grupo de códigos.

3. El origen de la mercancía:

Ya que el origen de procedencia de las mercancías de importación puede influir en las restricciones y en los aranceles, se tendrá que consultar previamente si hay algún tipo de acuerdo entre el país de origen y el país de destino. Dependiendo de esto, puede que la entrada de los materiales importados resulte más sencilla.

El impuesto aduanero se calcula buscando el código HS del producto que se va a importar. A continuación, a este dato se le multiplica el valor aduanero de la mercancía importada (valor CIF) y así se obtiene una cantidad estimada de los aranceles aduaneros a pagar.

(Tipo impositivo del arancel para un código HS) x (Valor CIF de la mercancía) = Arancel aduanero

Ante la situación de que un envío es devuelto o un paquete se queda retenido en la aduana, la empresa recibirá un aviso con la información y las indicaciones a seguir: documentación a presentar y el pago de los impuestos y aranceles respectivos.

Estos trámites se pueden realizar personalmente en la Aduana, contratando a un agente de aduanas o a través de Correos.